
El sol nació y
los pájaros cantaron,
pero ese día algo faltó
La gente miraba sin ver,
hipnotizada,
como siempre, como todos los días,
pero algo me faltó.
No era el cielo, allí estaba...
No era la soledad, ella me buscaba
No era el miedo, en mi él reinaba
Dónde un oido sereno que escuche
con una boca que no reproche?
Hoy lo encuentro, Amigo,
en cada flor,
en cada nuevo sol,
en cada voz...
porque ahora, estás conmigo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario